¿Tu perro encuentra tesoros especiales durante los paseos y los entierra de inmediato? ¿O incluso esconde sus juguetes en el jardín? La pasión por cavar y enterrar que tiene tu perro se debe a sus antepasados. Ellos solían esconder comida sobrante para tiempos difíciles.
¿Por qué un perro esconde huesos?
Los perros entierran todo lo que consideran valioso o quieren guardar para más tarde. Este comportamiento podría ser especialmente común si tu perro comparte su hogar con otros animales domésticos. Después de todo, de esta manera puede proteger a sus objetos favoritos de los ataques de otros.
A veces, el entierro de huesos y juguetes también puede ser simplemente un juego. Por ejemplo, si tu perro ha aprendido que desentierras las cosas que ha enterrado, esto podría resultarle divertido. O tal vez simplemente le gusta sentir la tierra bajo sus patas.
¿Los perros recuerdan sus escondites?
Los perros poseen un sentido del olfato extraordinariamente agudo que les permite rastrear fácilmente sus tesoros ocultos. La nariz de un perro tiene hasta 300 millones de receptores olfativos, en comparación con aproximadamente 6 millones en los humanos. Además, las fosas nasales de un perro funcionan de manera independiente. Gracias a esta anatomía nasal única, los perros son capaces de no solo reconocer qué están oliendo, sino también de dónde proviene el olor. De esta manera, pueden recuperar rápidamente tanto sus juguetes como los huesos.
Cuando cavar se convierte en un problema
En algunos casos, enterrar juguetes y huesos puede convertirse en un problema. Por ejemplo, cuando el perro cava tan intensamente que se lastima las patas o daña el jardín y los muebles. Para enseñarle a tu perro a no cavar, hay algunas opciones:
- Proporciona a tu perro juguetes rellenos de comida.
- Introduce variedad en su comportamiento de juego.
- Dale a tu perro mucha atención diaria para evitar que se aburra.
Si sientes que cavar está relacionado con el estrés o un comportamiento problemático más grave, consulta directamente a un experto. Sin embargo, es importante enfatizar nuevamente que enterrar juguetes y huesos es un comportamiento natural en los perros.